Por miles se contaron las, los y les personas que decidieron- muchas de ellas con libros en manos y carteles artesanales- volcarse a las calles de las principales ciudades del país a reclamar al gobierno de Javier Milei por el vaciamiento y desfinanciamiento de Universidades Públicas y de la educación pública en general en todos los niveles.
Desbordaron las plazas con estudiantes, que si bien fueron los grandes protagonistas, estuvieron acompañados de padres, abuelos, familias, profesores, científicos, artistas conformando una marcha intergeneracional e interclasistas y una de las primeras, de esta magnitud, no convocada por la política o por un solo organismo, sino surgida del mismo seno de la preocupación y la angustia de quienes ven el presente y el futuro de la Argentina seriamente comprometido.

Poco sirvió el video en cadena nacional del presidente Javier anunciando la noche anterior un déficit cero a costa del hambre del pueblo argentino, tampoco las amenazas de Patricia Bullrich sobre la activación de un operativo antipiquete y las declaraciones de “rareza” de una marcha que tuvo su epicentro en la ciudad de Buenos Aires pero que se conformó por cuadras y cuadras de personas en casi todo el país: 100 mil personas en Córdoba, 20 mil en Salta, 10 mil en Catamarca y otros miles en Chubut, Mendoza, San Luis, Jujuy, Río Negro, Tucumán, Entre Ríos, Tierra del Fuego, Santiago del Estero y grandes ciudades como Mar del Plata y Rosario.
Además de cientos de historias de estudiantes que son la primer generación que puede llegar a la Universidad y de las declaraciones de los rectores de algunas de las 72 universidades públicas, entre nacionales y provinciales, también se dieron cita políticos y funcionarios de los distintos espacios que reflexionaron sobre el hecho considerándolo un “hito”.
El ex gobernador de la provincia de Buenos Aires Felipe Solá dijo: «Es una alegría muy muy grande esta marcha porque se juntaron todas las generaciones. Al tocar el tema universitario se toca el pasado de mucho de nosotros, el presente de miles de personas y el futuro de todos los que están hoy en el secundario por ejemplo. Eso une muchísimo y constituye un error político tremendo. Este desastre que hacen con el presupuesto educativo y que golpea a la Universidad de una manera imposible de soportar, es también el desastre de los salarios, el desastre de las tarifas, el desastre de la entrega, el desastre de la política internacional de adhesión incondicional a Estados Unidos, el desastre de la desocupación y la caída total de actividad económica”

Es que los alumnos universitarios que asisten a las Universidades públicas son alrededor del 80 % del universo total de estudiantes universitarios. La calidad de estas universidades es indiscutida en el mundo entero a pesar de que los gobiernos de derecha que intentaron ir por ella dejaron frases imposibles de olvidar como las de Mauricio Macri y Esteban Bullrich respecto de la “desgracia de los que tienen que caer en la escuela pública”, las de la ex ministra de la ciudad Soledad Acuña que calificó a los docentes como pobres y fracasados al elegir las carreras de maestro o las de la ex gobernadora María Eugenia Vidal criticando la existencia de Universidades en el conurbano porque “todos sabemos que los pobres no llegan a la Universidad”.
Al respecto Lucía Cirmi Obón, economista feminista, ex funcionaria del desaparecido Ministerio de Mujeres de Nación afirmó en la marcha “Pensar la educación como un gasto en vez de como una inversión es la visión más cortoplacista que podemos tener. Hasta Adam Smith, el padre de la economía decía que la educación tenía que ser pública porque provee un bien publico a toda la sociedad.
Hoy marchamos no solo por el tipo de universidad que queremos, sino por el tipo de sociedad que queremos, porque sin mecanismos de movilidad ascendente como la universidad pública estamos proponiendo una sociedad donde cada clase va siempre por su mismo carril en la carrera y es una sociedad muy triste y muy peligrosa para vivir”

En un clima festivo y de muchísima calma los asistentes se quedaron hasta altas horas de la noche en las inmediaciones de la 9 de julio tratando de perpetuar el encuentro en la que defender este bastión como uno de los que identifica a nuestro país fue la bandera.
Si bien hubo banderas que identificaban grupos o facultades y universidades lo que más abundó fueron los carteles hechos a mano, algunos sobre cartones improvisados, otros más artísticos y con colagges. En ellos se leían frases como «Que el privilegio no te nuble la empatía». «Rebelate y educate». «Más plata para educar, no para reprimir». «Más Télam, Menos Twitter».. «No nos querés libres, nos querés ignorantes». «Viva la educación, carajo». «Milei, date cuenta, Conan está muerto y la universidad pública más viva que nunca»: «Los lápices siguen escribiendo». «La educación no se vende, se defiende», «Exigimos con la nuestra bancar la universidad», «Sin ciencia no hay Conan», «Educación pública = movilidad social», «No hay libertad sin un pueblo estudiante», «Villero y universitario, el terror de los libertarios». «Universidad pública en peligro». “Estudiá no seas un Adorni” “Dejenme cursar, todavía no entendí a Lacan”“Prefieren comprar misiles que libros”y hasta los vendedores se sumaron a la cruzada con frases “ Birra fría como el corazón de Milei”.

Miembros de la cultura y el mundo artístico también se hicieron presente como Raúl Rizzo quien afirmó: “Me convoca a estar acá la educación pública. La Universidad argentina tiene un prestigio ganado en el mundo entero. Esto que se está haciendo es de una crueldad despiadada que es coherente con el poder que ostenta este gobierno y aquellos que lo respaldan y que tienen objetivos realmente perversos” y sentenció “Esto puede ser bisagra, el comienzo de algo muy fuerte”
Muchos de los asistentes a la marcha llevaban, como se había pedido libros en la mano: la Constitución Nacional fue la más vista pero también libros de Rodolfo Walsh, Eduardo Galeano, Mariana Enríquez, María Teresa Andruetto y ejemplares del Nunca Más.

Presente en el acto el ex ministro de Educación de la Provincia de Buenos Aires Mario Oporto también reflexionó sobre lo vivido: “Es una movilización incomparable, sacando Ezeiza como movilizaciones políticas que yo haya participado y que recuerdo, no creo que haya una mayor. Una movilización donde no hubo una conducción única donde la gente que se concentró lo hizo en forma espontánea y se transformó multigeneracional y multiclasista. Es un golpe para el gobierno que se metió con un tema sagrado para la Argentina que es la educación pública gratuita de calidad simbolizada en la escuela y las universidades”
Y subrayó: “Es una manifestación de la que no es dueño nadie y tenemos la obligación de hacer de este sentimiento un proyecto político que no es de un sector y eso es un desafío muy interesante”

Entre los carteles que se vieron no solo en las marchas sino también en las redes uno que se repitió por miles fue la creación de una ilustradora Pilar Veiga, conocida en las redes por @pilardibujito que compartió un escudo que le llevó 13 horas dibujarlo y permitió que lo bajaran e imprimieran para esta marcha.

También estuvieron presentes en la marcha la Ministra de las Mujeres y Diversidad de la provincia de Buenos Aires Estela Díaz y la ministra de Gobierno Cristina Alvarez Rodríguez. Alvarez Rodríguez afirmó “ Es hermoso ver como el pueblo argentino y, sobre todo los jovenes y las jovenes pelean por su derechos, no quieren retroceder, no quieren perder universidad pública gratuita de calidad como la que hoy tienen porque es el presente pero, también es el futuro” en tanto Estela Díaz aseguró: “Es muy emocionante este pueblo. La educación publica gratuita de calidad es un sentimiento, es historia, es identidad del pueblo argentino y acá la tenemos en las calles y trasciende generaciones, porque las pibas y los pibes lo aprendieron de sus abuelos, de sus viejos de sus madres. Lo que vemos, esta es la verdad, una fiesta de enorme emoción para defender la educación pública”
El mundo de la justicia también estuvo presente en la marcha como la presencia del juez federal Alejandro Slokar, que además es profesor de la UBA y de la UNLP y se expresó al respecto: Slokar “La comunidad del conocimiento le va a ayudar a pensar al gobierno para que salga del gravisimo error de devastar la educación, la ciencia, las artes, en definitiva la cultura argentina de la que nos enorgullecemos y de la que somos referencia en el mundo. La marcha no es solo contra el ajuste hay una cuestión más profunda es esa narrativa antiestatal, contra ese disparate de entender al Estado como una organización criminal para después desentenderse de la salud, de la educación, de la ciencia y así dejar librados a la ley de la selva a millones de argentinos. Ésa es la cuestión de fondo, porque ésto no es cambio, ésto es profundizar la crisis mediante un caos organizado acompañado de bestialidad y ningún estudiante ni docente argentino se va a dejar humillar. Como decimos siempre *Hay que ganar la calle para no perder el aula*”

Una movilización que fue multipartidaria y que contó también con representantes del radicalismo defendiendo la educación pública como Ricardo Alfonsín que dijo: “Es impresionante la magnitud de la manifestación. Me hace ilusionar porque creo que con una manifestación como ésta vamos a tener éxito en la lucha para salvar la Universidad pública y gratuita. Si bien no alcanza con esta marcha y hay que seguir trabajando, sin esta marcha sería imposible.
Trabajar por la universidad es trabajar por el país y por la conducción de una sociedad con mayores niveles de justicia social, esa justicia social que el presidente dice que es un disparate”

Desde el mismo sindicalismo el diputado nacional Hugo Yasky también se expresó asegurando que “No me esperaba esta cantidad, es impresionante, rompe todos los cálculos previos, es una gran señal de esperanza para nuestro pueblo. Muchos de los pibes jóvenes que hoy vi marchando sé que lo hacen por primera vez pero nos están demostrando esta historia todavía tienen un final abierto y que el pueblo argentino no está dispuesto a ponerse de rodillas. Sé que esta imagen se va a ver en todo el mundo y es también una señal para hablar de la fragilidad de un gobierno que cada vez se va recluir más con el apoyo de los millonarios, los poderosos, y cada vez va a estar más rodeado de la protesta. Hay un punto de inflexión van un poco más de 4 meses de este gobierno. Antes decíamos 4 meses era poca la reacción hoy con esta marcha podemos decir que es increíble que a solo cuatro meses tengamos esta multitud marchando en la calle”

También el senador nacional Mariano Recalde se dio cita a la convocatoria afirmando que “Es un punto de inflexión. La defensa de algo tan arraigado en nuestro pueblo, como lo es la educación pública se hace sentir en la calle. Sin lugar a dudas va a ser un antes y un después como viene pasando cada vez que el pueblo sale a la calle”







